Lectura diaria de la Biblia
4 de Noviembre 2010 – Jueves
Mundo: Habrá más alegría en el cielo por un pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse.
Fe: El cristiano no puede quedarse de brazos cruzados sabiéndose elegido por Jesús: con él ha de ir en busca de las ovejas perdidas de su familia, trabajo, amistades.
Solían acercarse a Jesús todos los publicanos y los pecadores a escucharle. Y los fariseos y los escribas murmuraban entre ellos: Ese acoge a los pecadores y come con ellos. Jesús les dijo esta parábola: Si uno de vosotros tiene cien ovejas y se le pierde una, ¿no deja las noventa y nueve en el campo y va tras la descarriada, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, se la carga sobre los hombros, muy contento; y, al llegar a casa, reúne a los amigos y a los vecinos para decirles: “¡Felicitadme!, he encontrado la oveja que se me había perdido”. Os digo que así también habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse. Y si una mujer tiene diez monedas y se le pierde una, ¿no enciende una lámpara y barre la casa y busca con cuidado, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, reúne a las amigas y a las vecinas para decirles: “¡Felicitadme!, he encontrado la moneda que se me había perdido”. Os digo que la misma alegría habrá entre los ángeles de Dios por un solo pecador que se convierta.
Flp 3, 3-8a; Sal 104, 2-7 . Lucas 15, 1-10