Lectura diaria de la Biblia
8 de agosto 2023 – martes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.
Papa Francisco: Al igual que Pedro, no basta nuestra experiencia y autosuficiencia. En ocasiones también nosotros atravesamos tempestades que nos revelan nuestra fragilidad, nuestra falta de fe. Pero saben algo; no estamos solos porque Dios no nos abandona. El Evangelio nos invita a ser hombres y mujeres de mucha fe, no de poca fe, y a tener certeza de la presencia de Dios en nuestras vidas. Te invito a que tu oración de estos días sea: Señor, aumenta mi fe. (09-08-2020)
Después que la gente se hubo saciado, enseguida Jesús apremió a sus discípulos a que subieran a la barca y se le adelantaran a la otra orilla mientras él despedía a la gente. Y después de despedir a la gente subió al monte a solas para orar. Llegada la noche estaba allí solo. Mientras tanto la barca iba ya muy lejos de tierra, sacudida por las olas, porque el viento era contrario. A la cuarta vela de la noche se les acercó Jesús andando sobre el mar. Los discípulos, viéndole andar sobre el agua, se asustaron y gritaron de miedo, diciendo que era un fantasma. Jesús les dijo enseguida: ¡Ánimo, soy yo, no tengáis miedo! Pedro le contestó: Señor, si eres tú, mándame ir a ti sobre el agua. Él le dijo: Ven. Pedro bajó de la barca y echó a andar sobre el agua acercándose a Jesús; pero, al sentir la fuerza del viento, le entró miedo, empezó a hundirse y gritó: Señor, sálvame. Enseguida Jesús extendió la mano, lo agarró y le dijo: ¡Hombre de la poca fe! ¿Por qué has dudado?. En cuanto subieron a la barca amainó el viento. Los de la barca se postraron ante él, diciendo: Realmente eres Hijo de Dios. Terminada la travesía, llegaron a tierra de Genesaret. Y los hombres de aquel lugar, apenas lo reconocieron, pregonaron la noticia por toda aquella comarca y le trajeron a todos los enfermos. Le pedían tocar siquiera la orla de su manto. Y cuantos la tocaron quedaban curados.
Números 12, 1-13; Salmo 50, 3-7.12-13 . Mateo 14, 22-36