Lectura diaria de la Biblia
1 de agosto 2020 – sábado. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.
Papa Francisco: Juan sigue adelante en el camino del Señor; da testimonio de Jesús no solo mostrándolo –“¡Es este!”- sino también llevando la vida hasta las últimas consecuencias, terminando con el martirio: precursor de la vida y de la muerte de Jesucristo. El grande sufre muchas pruebas; se abaja, conoce el camino del abajamiento. “Conviene que Él crezca, yo en cambio debo disminuir”. Cuando estaba en la cárcel, sufrió la prueba de la noche en su alma. Esto conmueve: el más grande, manda a dos discípulos a preguntar a Jesús: “¿Eres tú o me he equivocado y tenemos que esperar a otro?”. Es la oscuridad del error, la oscuridad de una vida consumida en el error. Esto fue para él una cruz (6-2-2015).
Oyó el tetrarca Herodes lo que se contaba de Jesús y dijo a sus cortesanos: Ese es Juan Bautista, que ha resucitado de entre los muertos, y por eso las fuerzas milagrosas actúan en él. Es que Herodes había mandado prender a Juan y lo había metido en la cárcel encadenado, por motivo de Herodías, mujer de su hermano Filipo; porque Juan le decía que no le era lícito vivir con ella. Quería mandarlo matar, pero tuvo miedo de la gente, que lo tenía por profeta. El día del cumpleaños de Herodes, la hija de Herodías danzó delante de todos, y le gustó tanto a Herodes que juró darle lo que pidiera. Ella, instigada por su madre, le dijo: Dame ahora mismo en una bandeja la cabeza de Juan Bautista. El rey lo sintió; pero, por el juramento y los invitados, ordenó que se la dieran, y mandó decapitar a Juan en la cárcel. Trajeron la cabeza en una bandeja, se la entregaron a la joven, y ella se la llevó a su madre. Sus discípulos recogieron el cadáver, lo enterraron, y fueron a contárselo a Jesús.
Jeremías 26, 11-16.24; Salmo 68, 15-16.30-31.33-34 . Mateo 14, 1-12