Lectura diaria de la Biblia
6 de agosto 2019 – martes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.
FIESTA DE LA TRANSFIGURACIÓN DEL SEÑOR
Papa Francisco: El acontecimiento de la Transfiguración del Señor nos ofrece un mensaje de esperanza: nos invita a encontrar a Jesús, para estar al servicio de los hermanos. La ascensión de los discípulos al monte Tabor nos induce a reflexionar sobre la importancia de separarse de las cosas mundanas, para emprender un camino hacia lo alto y contemplar a Jesús. Se trata de ponernos a la escucha atenta y orante del Cristo, el Hijo amado del Padre, buscando momentos de oración que permiten la acogida dócil y alegre de la Palabra de Dios. En esta ascensión espiritual, en esta separación de las cosas mundanas, estamos llamados a redescubrir el silencio pacificador y regenerador de la meditación del Evangelio, de la lectura de la Biblia, que conduce hacia una meta rica de belleza, de esplendor y de alegría (6-8-2017).
Tomó Jesús a Pedro, a Juan y a Santiago y subió a lo alto del monte para orar. Y, mientras oraba, el aspecto de su rostro cambió y sus vestidos brillaban de resplandor. De repente, dos hombres conversaban con él: eran Moisés y Elías, que, apareciendo con gloria, hablaban de su éxodo, que iba a consumar en Jerusalén. Pedro y sus compañeros se caían de sueño, pero se espabilaron y vieron su gloria y a los dos hombres que estaban con él. Mientras éstos se alejaban de él, dijo Pedro a Jesús: Maestro, que bueno es que estemos aquí. Haremos tres tiendas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías. No sabía lo que decía. Todavía estaba diciendo esto, cuando llegó una nube que los cubrió con su sombra. Se llenaron de temor al entrar en la nube. Y una voz desde la nube decía: Este es mi Hijo, el elegido, escuchadlo. Después de oírse la voz, se encontró Jesús solo. Ellos guardaron silencio y, por aquellos días, no contaron a nadie nada de lo que habían visto.
2Pedro 1, 16-19; Salmo 96, 1-2.5-6.9 . Lucas 9, 28b-36