Lectura diaria de la Biblia
22 de diciembre 2017 – viernes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.
Papa Francisco: Como canta María en el Magníficat, el Señor derriba a los poderosos del trono y ensalza a los humildes, colma de bienes a los hambrientos y a los ricos despide vacíos… En Navidad Dios se nos dona todo donando a su Hijo, el Único, que es toda su alegría. Y solo con el corazón de María, la humilde y pobre hija de Sión, convertida en Madre del Hijo del Altísimo, es posible exultar y alegrarse por el gran don de Dios y por su imprevisible sorpresa. Que Ella nos ayude a percibir el asombro por el nacimiento de Jesús, el don de los dones, el regalo inmerecido que nos trae la salvación. El encuentro con Jesús, nos hará también sentir a nosotros este gran asombro. Pero no podemos tener este asombro, no podemos encontrar a Jesús, si no lo encontramos en los demás, en la historia y en la Iglesia (20-12-2015).
María dijo: Proclama mi alma la grandeza del Señor, “se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava”. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: “su nombre es Santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación”. Él hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón, “derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia” –como lo había prometido a nuestros padres- en favor de Abrahán y su descendencia por siempre. María se quedó con Isabel unos tres meses y volvió a su casa.
1Sam 1, 24-28; Sal 1S 2, 1-7 . Lucas 1, 46-56