Lectura diaria de la Biblia
11 de febrero 2017 – sábado. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.
Papa Francisco: María está atenta a esas bodas ya comenzadas, es solícita a las necesidades de los novios. No se ensimisma, no se enfrasca en su mundo, su amor le hace ser hacia los otros. Tampoco busca a las amigas para comentar lo que está pasando y criticar la mala preparación de las bodas… Y todo se pudo hacer porque una mujer –la Virgen- estuvo atenta, supo poner en manos de Dios sus preocupaciones, y actuó con sensatez y coraje… El mejor de los vinos va a venir. Dios siempre se acerca a la periferia de los que se han quedado sin vino, los que solo tienen para beber desalientos; Jesús siente debilidad por derrochar el mejor de los vinos con aquellos a los que por una u otra razón, ya sienten que se le han roto todas las tinajas (6-7-2015).
Había una boda en Caná de Galilea y la madre de Jesús estaba allí; Jesús y sus discípulos estaban también invitados a la boda. Faltó el vino, y la madre de Jesús le dice: No tienen vino. Jesús le dice: Mujer, ¿qué tengo yo que ver contigo? Todavía no ha llegado mi hora. Su madre dijo a los sirvientes: Haced lo que él os diga. Había allí colocadas seis tinajas de piedra, para las purificaciones de los judíos, de unos cien litros cada una. Jesús les dice: Llenad las tinajas de agua. Y las llenaron hasta arriba. Entonces les dice: Sacad ahora y llevádselo al mayordomo. Ellos se lo llevaron. El mayordomo probó el agua convertida en vino sin saber de dónde venía (los sirvientes si lo sabían, pues habían sacado el agua), y entonces llama al esposo y le dice: Todo el mundo pone primero el vino bueno y cuando ya están bebidos, el peor; tú, en cambio, has guardado el vino bueno hasta ahora. Este fue el primero de los signos que Jesús realizó en Caná de Galilea; así manifestó su gloria y sus discípulos creyeron en él.
Eclo 24, 1-2.5-7.12-16.20-30; Sal Lc 1, 46-55 . Juan 2, 1-11