Lectura diaria de la Biblia
18 de Febrero 2012 – Sábado
Mundo: La Ley y los Profetas, y la voz del Padre Dios, avalan la persona y la misión de Cristo. ¿Hay razones humanas más fuertes para rechazarlo?
Fe: Este es mi Hijo amado; escuchadlo: sólo Jesús tiene palabras de vida eterna.
Jesús se llevó a Pedro, a Santiago y a Juan, subió con ellos solo a una montaña alta, y se transfiguró delante de ellos. Sus vestidos se volvieron de un blanco deslumbrador, como no puede dejarlos ningún batanero del mundo. Se les aparecieron Elías y Moisés, conversando con Jesús. Entonces Pedro tomó la palabra y le dijo a Jesús: Maestro, ¡qué bien se está aquí! Vamos a hacer tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías. Estaban asustados, y no sabía lo que decía. Se formó una nube que los cubrió, y salió una voz de la nube: Éste es mi Hijo amado; escuchadlo. De pronto, al mirar alrededor, no vieron nada más que a Jesús, solo con ellos. Cuando bajaban de la montaña, Jesús les mandó: No contéis a nadie lo que habéis visto, hasta que el Hijo del hombre resucite de entre los muertos. Esto se les quedó grabado, y discutían que querría decir aquello de resucitar de entre los muertos. Le preguntaron: ¿Por qué dicen los escribas que primero tiene que venir Elías?. Les contestó él: Elías vendrá primero y lo restablecerá todo. Ahora, ¿por qué está escrito que el Hijo del hombre tiene que padecer mucho y ser despreciado? Os digo que Elías ya ha venido, y han hecho con él lo que han querido, como estaba escrito.
St 3, 1-10; Sal 11, 2-8 . Marcos 9, 2-13