Lectura diaria de la Biblia
14 de enero 2012 – Sábado
Mundo: He venido a llamar a los pecadores… ¡Qué el ruido del mundo no impida a los alejados escuchar la invitación de Cristo a ser felices!
Fe: ¡Sígueme! Quien oye de Jesús esta palabra y la coge en su corazón, tiene ya la fuerza para seguirle.
Jesús salió de nuevo a la orilla del lago; la gente acudía a él y les enseñaba. Al pasar vio a Leví, el de Alfeo, sentado al mostrador de los impuestos y le dijo: Sígueme. Se levantó y lo siguió. Estando Jesús a la mesa en su casa, de entre los muchos que lo seguían un grupo de publicanos y pecadores se sentaron con Jesús y sus discípulos. Algunos escribas fariseos, al ver que comía con publicanos y pecadores, les dijeron a los discípulos: ¡De modo que come con publicanos y pecadores! Jesús lo oyó y les dijo: No necesitan médico los sanos, sino los enfermos. No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores.
1S 9, 1-4.17-19; 10, 1a; Sal 20, 2-7 . Marcos 2, 13-17