Lectura diaria de la Biblia
15 de Noviembre 2011 – Martes
Mundo: Quien tenga sano el deseo de ver a Cristo, aunque no tenga fe, la recibirá de Dios.
Fe: Hoy tengo que alojarme en tu casa: también éste es hijo de Abrahán.
Entró Jesús en Jericó y atravesaba la ciudad. Un hombre llamado Zaqueo, jefe de publicanos y rico, trataba de distinguir quien era Jesús, pero la gente se lo impedía, porque era bajo de estatura. Corrió más adelante y se subió a una higuera, para verlo, porque tenía que pasar por allí. Jesús, al llegar a aquel sitio, levantó los ojos dijo: Zaqueo, baja enseguida, porque hoy tengo que alojarme en tu casa. Él bajó enseguida y lo recibió muy contento. Al ver esto, todos murmuraban, diciendo: Ha entrado a hospedarse en casa de un pecador. Pero Zaqueo se puso en pie, y dijo al Señor: Mira, la mitad de mis bienes, Señor, se la doy a los pobres; y si de alguno me he aprovechado, le restituiré cuatro veces más. Jesús le contestó: Hoy ha sido la salvación de esta casa; también éste es hijo de Abrahán. Porque el Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido.
2M 6, 18-31; Sal 3, 2-7 . Lucas 19, 1-10