Lectura diaria de la Biblia
24 de Junio 2011 – Viernes
SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA
Mundo: Profetas como Juan son tan molestos a los mundanos que los Herodes de ayer y de hoy acaban con ellos.
Fe: Juan fue la voz que clamó en el desierto, preparando los caminos para recibir a Jesús.
A Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y la felicitaban. A los ocho días fueros a circuncidar al niño y lo llamaban Zacarías, como a su padre. La madre intervino diciendo: ¡No! Se va a llamar Juan. Le replicaron: Ninguno de tus parientes se llama así. Entonces preguntaban por señas al padre como quería que se llamase. Él pidió una tablilla y escribió: Juan es su nombre. Todos se quedaron extrañados. Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios. Los vecinos quedaron sobrecogidos, y corrió la noticia por toda la montaña de Judea. Y todos los que le oían reflexionaban diciendo: ¿Qué va a ser este niño?. Porque la mano del Señor estaba con él. El niño iba creciendo, y su carácter se afianzaba; vivió en el desierto hasta que se presentó a Israel.
Is 49, 1-6; Sal 138, 1-15; Hch 13, 22-26 . Lucas 1, 57-66.80