Lectura diaria de la Biblia
7 de Mayo 2011 – Sábado
Mundo: No hay vida humana sin problemas: noches, huracanes, depresiones. ¡Cristo puede ser la respuesta!
Fe: Jesús está siempre atento a nuestra vida, y acude a nuestra ayuda: Soy yo, no temáis.
Al oscurecer, los discípulos de Jesús bajaron al lago, embarcaron y empezaron a atravesar hacia Cafarnaún. Era ya noche cerrada, y todavía Jesús no los había alcanzado; soplaba un viento fuerte, y el lago se iba encrespando. Habían remado unos cinco o seis kilómetros, cuando vieron a Jesús que se acercaba a la barca, caminando sobre el lago, y se asustaron. Pero él les dijo: Soy yo, no temáis. Querían recogerlo a bordo, pero la barca tocó tierra enseguida, en el sitio a donde iban.
Hch 6, 1-7; Sal 32, 1-5.18-19 . Juan 6, 16-21