Archivo de diciembre de 2021

Lectura diaria de la Biblia

viernes, 31 de diciembre de 2021

31 de diciembre 2021 – viernes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: El Verbo era la luz verdadera que alumbra a todo hombre (1, 4-5.9). Los hombres hablan mucho de la luz, pero a menudo prefieren la tranquilidad engañadora de la oscuridad. Vino a su casa, y los suyos no lo recibieron (Jn 1, 11); porque este es el juicio: que la luz –Jesús- vino al mundo, y los hombres prefirieron la tiniebla a la luz, porque sus obras eran malas. Pues todo el que obra el mal detesta la luz, y no se acerca a la luz, para no verse acusado por sus obras (Jn 3, 19-20). Quien obra el mal, odia la luz (4-1-2015).

En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba junto a Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba en el principio junto a Dios. Por medio de él se hizo todo, y sin él no se hizo nada de cuanto se ha hecho. En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. Y la luz brilla en la tiniebla, y la tiniebla no la recibió. El Verbo era la luz verdadera, que alumbra a todo hombre, viniendo al mundo. En el mundo estaba; el mundo se hizo por medio de él, y el mundo no lo conoció. Vino a su casa y los suyos no lo recibieron. Pero a cuantos lo recibieron, les dio poder de ser hijos de Dios, a los que creen en su nombre. Éstos no han nacido de sangre, ni de deseo de carne, ni de deseo de varón, sino que han nacido de Dios. Y el verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria: gloria como del Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad. Juan da testimonio de él y grita diciendo: Éste es de quien dije: El que viene detrás de mí se ha puesto delante de mí, porque existía antes que yo. Pues de su plenitud todos hemos recibido, gracia tras gracia.

1Juan 2, 18-21; Salmo 95, 1-2.11-13 . Juan 1, 1-5.9-16

Lectura diaria de la Biblia

jueves, 30 de diciembre de 2021

30 de diciembre 2021 – jueves. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: Cuando encontramos a Jesús, quedamos fascinados, conquistados, y es una alegría dejar nuestro acostumbrado modo de vivir, tal vez árido y apático, para abrazar el Evangelio, para dejarnos guiar por la lógica nueva del amor y del servicio humilde y desinteresado. Os hago una pregunta: ¿cuántos de vosotros leéis cada día un pasaje del Evangelio? Y ¿cuántos de vosotros, tal vez, tenéis prisa por acabar el trabajo con el fin de no perder la telenovela…? Tener el Evangelio entre las manos, tener el Evangelio sobre la mesilla, tener el Evangelio en la cartera, tener el Evangelio en el bolsillo y abrirlo para leer la Palabra de Jesús: así viene el reino de Dios. El contacto con la Palabra de Jesús nos acerca al reino de Dios. Se lee lo que dice Jesús, y Jesús está allí (26-7-2014).

Había una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser, ya muy avanzada en años. De joven había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones noche y día. Presentándose en aquel momento, alababa también a Dios y hablaba del niño a todos los que aguardaban la liberación de Jerusalén. Y, cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, Jesús y sus padres volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño, por su parte, iba creciendo y robusteciéndose, lleno de sabiduría; y la gracia de Dios estaba con él.

1Juan 2, 12-17; Salmo 95, 7-10 . Lucas 2, 36-40

Lectura diaria de la Biblia

miércoles, 29 de diciembre de 2021

29 de diciembre 2021 – miércoles. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: María y José encuentran en el templo las raíces del pueblo: la promesa de Dios no se realiza individualmente y de una sola vez, sino juntos y a lo largo de la historia. Y encuentran también las rices de la fe, porque la fe es el arte de vivir con Dios, que se consigue por la experiencia de quien nos ha precedido en el camino. Cuanto bien nos hace, como a Simeón, tener al Señor en brazos (Lc 2, 28). No solo en la cabeza y en el corazón, sino en las manos, en todo lo que hacemos: en la oración, en el trabajo, en la comida, al teléfono, en la escuela, con los pobres, en todas partes. Dejarse encontrar por Jesús, ayudar a encontrar a Jesús: este es el secreto para mantener viva la llama de la vida espiritual (2-2-2018).

Cuando se cumplieron los días de su purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor, y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: un par de tórtolas o dos pichones. Había entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Espíritu Santo estaba en él. Le había sido revelado por el Espíritu Santo que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo. Y cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo acostumbrado según la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos “han visto a tu Salvador”, a quien has presentado ante todos los pueblos: “luz para alumbrar a las naciones”, y gloria de tu pueblo Israel. Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. Simeón los bendijo y dijo a María, su madre: Este ha sido puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; y será como un signo de contradicción –y a ti misma una espada te traspasará el alma-, para que se pongan de manifiesto los pensamientos de muchos corazones.

1Juan 2, 3-11; Salmo 95, 1-2a.2b-3.5b-6 . Lucas 2, 22-35

Lectura diaria de la Biblia

martes, 28 de diciembre de 2021

28 de diciembre 2021 – martes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

FIESTA DE LOS SANTOS INOCENTES

Papa Francisco: El Niño Jesús, nacido el Belén, es el signo que Dios dio a los que esperaban la salvación, y permanece para siempre como signo de la ternura de Dios y de su presencia en el mundo. El ángel dijo a los pastores: Y aquí tenéis la señal: encontraréis un niño… Cuando los niños son recibidos, amados, custodiados, tutelados, la familia está sana, la sociedad mejora, el mundo es más humano. Dios hoy nos repite también a nosotros, hombres y mujeres del siglo XXI: Y aquí tenéis la Señal, buscad al niño… El Niño de Belén es frágil, como todos los recién nacidos. No sabe hablar y, sin embargo es la Palabra que se ha hecho carne, que ha venido a cambiar el corazón y la vida de los hombres. Este Niño, como todo niño, es débil y necesita ayuda y protección. También hoy los niños necesitan ser acogidos y defendidos desde el seno materno (25-5-2014).

Cuando se retiraron los magos, el ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: Levántate, toma al niño y a su madre y huye a Egipto; quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo. José se levantó, tomó al niño y a su madre, de noche, se fue a Egipto y se quedó hasta la muerte de Herodes para que se cumpliese lo que dijo el Señor por medio del profeta: De Egipto llamé a mi hijo. Al verse burlado por los magos, Herodes montó en cólera y mando matar a todos los niños de dos años para abajo, en Belén y sus alrededores, calculando el tiempo por lo que había averiguado de los magos. Entonces se cumplió lo dicho por medio del profeta Jeremías: Un grito se oye en Ramá, llanto y lamentos grandes; es Raquel que llora por sus hijos, y rehúsa el consuelo, porque ya no viven.

1Juan 1, 5-2, 2; Salmo 123, 2-5.7c-8 . Mateo 2, 13-18

Lectura diaria de la Biblia

lunes, 27 de diciembre de 2021

27 de diciembre 2021 – lunes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

FIESTA DE SAN JUAN, APÓSTOL Y EVANGELISTA

Papa Francisco: A la llamada de Jesús, los primeros apóstoles no dudaron ni un instante en dejarlo todo y seguirlo: inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron (Mt 4, 20). También aquí nos asombra el entusiasmo de los Apóstoles, que, atraídos de tal manera por Cristo, se sienten capaces de emprender cualquier cosa y de atreverse, con él, a todo. Cada uno en su corazón puede preguntarse sobre su relación personal con Jesús (30-11-2015).

El primer día de la semana, María la Magdalena echó a correr y fue donde estaba Simón Pedro y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo: Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto. Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; e, inclinándose, vio los lienzos tendidos; pero no entró. Llegó también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro: vio los lienzos tendidos y el sudario con que le habían cubierto la cabeza, no con los lienzos, sino enrollado en un sitio aparte. Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó.

1Juan 1, 1-4; Salmo 96, 1-2.5-6.11-12 . Juan 20, 2-8

Lectura diaria de la Biblia

domingo, 26 de diciembre de 2021

26 de diciembre 2021 – domingo. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA

Papa Francisco: Realmente, hoy es un día hermoso… Hoy celebramos la fiesta de la Sagrada Familia de Nazaret. El término “sagrada” coloca a esta familia en el ámbito de la santidad, que es un don de Dios pero, al mismo tiempo, es una adhesión libre y responsable al plan de Dios. Este fue el caso de la familia de Nazaret: estaba totalmente a disposición de la voluntad de Dios. ¿Cómo no asombrarse, por ejemplo, de la 1. Docilidad de María a la acción del Espíritu Santo que le pide que se convierta en la madre del Mesías? Porque María, como toda joven de su tiempo, estaba a punto de realizar su proyecto de vida, es decir, casarse con José. Pero cuando se dio cuenta de que Dios la llamaba a una misión particular, no dudó en proclamarse su “esclava” (cf. Lucas 1, 38). Jesús exaltará su grandeza no tanto por su papel de madre, sino por su obediencia a Dios. Jesús dijo: Dichosos más bien los que escuchan la palabra de Dios y la guardan (Lucas 11, 28), como María. Y cuando no comprende plenamente los acontecimientos que la involucran, María medita en silencio, reflexiona y adora la iniciativa divina. Su presencia al pie de la cruz consagra esta disponibilidad total. 2. Luego, en lo que respecta a José, el Evangelio no nos refiere ni una sola palabra: no habla, sino que actúa por obediencia. Es el hombre del silencio, el hombre de la obediencia. 3. Finalmente, la tercera persona de la Sagrada Familia: Jesús. Él es la voluntad del Padre: sobre él, dice san Pablo, no hubo “si” y “no”, sino solo “si” (cf. 2Corintios 1, 19). Y esto se manifestó en muchos momentos de su vida terrenal. Por ejemplo, el episodio en el templo en el que, a los padres angustiados que lo buscaban, les respondió: ¿No sabíais que yo debía estar en la casa de mi Padre? (Lucas 2, 49); o su constante repetición. Mi alimento es hacer la voluntad del que me ha enviado (Juan 4, 34); su oración en el Huerto de los Olivos: Padre mío, si esto no puede pasar sin que yo lo beba, hágase tu voluntad (Mateo 26, 42). Todos estos acontecimientos son la perfecta realización de las mismas palabras de Cristo que dice: No quisiste sacrificio y oblación. Entonces dije: “¡He aquí que vengo para hacer, oh Dios, tu voluntad!” (Hebreos 10, 5-7; Salmos 40, 7-9). 4. María, José, Jesús: la Sagrada Familia de Nazaret que representa una respuesta coral a la voluntad del Padre: los tres miembros de esta familia se ayudan mutuamente a descubrir el plan de Dios. Rezaban, trabajaban, se comunicaban. Y yo me pregunto: ¿tú, en tu familia, sabes cómo comunicarte o eres como esos chicos que en la mesa, cada uno con su teléfono móvil, están chateando? En esa mesa no se comunican entre ellos. Debemos reanudar el diálogo en la familia: padres, madres, hijos, abuelos y hermanos deben comunicarse entre sí… Es una tarea que hay que hacer hoy, precisamente en el día de la Sagrada Familia (29-12-2019).

Eclesiástico 3, 2-6.12-14: El Señor honra más al padre que a los hijos y afirma el derecho de la madre sobre ellos. Quien honra a su padre expía sus pecados, y quien respeta a su madre es como quien acumula tesoros. Quien honra a su padre se alegrará de sus hijos y cuando rece, será escuchado. Quien respeta a su padre tendrá larga vida, y quien honra a su madre, obedece al Señor. Hijo, cuida de tu padre en su vejez y durante su vida no le causes tristeza. Aunque pierda el juicio, se indulgente con él y no lo desprecies aun estando tú en pleno vigor. Porque la compasión hacia el padre no será olvidada, y te servirá para reparar tus pecados.

Salmo 127, 1bc-5: Dichoso los que temen al Señor y siguen sus caminos.

Colosenses 3, 12-21: Hermanos: Como elegidos de Dios, santos y amados, revestíos de compasión entrañable, bondad, humildad, mansedumbre, paciencia. Sobrellevaos mutuamente y perdonaos, cuando alguno tenga quejas contra otro. El Señor os ha perdonado: haced vosotros lo mismo. Y por encima de todo esto, el amor, que es el vínculo de la unidad perfecta. Que la paz de Cristo reine en vuestro corazón: a ella habéis sido convocados, en un solo cuerpo. Sed también agradecidos. La Palabra de Cristo habite entre vosotros en toda su riqueza; enseñaos unos a otros con toda sabiduría; exhortaos mutuamente. Cantad a Dios, dando gracias de corazón, con salmos, himnos y cánticos inspirados. Y todo lo que de palabra o de obra realicéis, sea todo en nombre de Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él. Mujeres, sed sumisas a vuestros maridos, como conviene en el Señor. Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas. Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, que eso agrada al Señor. Padres, no exasperéis a vuestros hijos, no sea que pierdan el ánimo.

Lucas 2, 22-40: Cuando se cumplieron los días de su purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor, y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: un par de tórtolas o dos pichones. Había entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Espíritu Santo estaba con él. Le había sido revelado por el Espíritu Santo que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo. Y cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo acostumbrado según la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel. Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. Simeón los bendijo y dijo a María, su madre: Éste ha sido puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; y será como un signo de contradicción -y a ti misma una espada te traspasará el alma-, para que se pongan de manifiesto los pensamientos de muchos corazones. Y, cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño, por su parte, iba creciendo y robusteciéndose, lleno de sabiduría; y la gracia de Dios estaba con él.

Lectura diaria de la Biblia

sábado, 25 de diciembre de 2021

25 de diciembre 2021 – sábado. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DEL SEÑOR

Papa Francisco: José, con María su esposa, subió a la ciudad de David, que se llama Belén. (Lc 2, 4). Esta noche, también nosotros subimos a Belén para descubrir el misterio de la Navidad. Belén: el nombre significa casa del pan. En esta “casa” el Señor convoca hoy a la humanidad. Él sabe que necesitamos alimentarnos para vivir. Pero sabe también que los alimentos del mundo no sacian el corazón. Belén es el punto de inflexión para cambiar el curso de la historia. Allí, Dios, en la casa del pan, nace en un pesebre. Como si nos dijera: aquí estoy para vosotros, como vuestro alimento. No toma, sino que ofrece el alimento; no da algo, sino que se da él mismo. En Belén descubrimos que Dios no es alguien que toma la vida, sino aquél que da la vida. Al hombre, acostumbrado desde los orígenes a tomar y comer, Jesús le dice: Tomad, comed: esto es mi cuerpo (Mt 26, 26). El cuerpecito del Niño de Belén propone un modelo de vida nuevo: no devorar y acaparar, sino compartir y dar. Dios se hace pequeño para ser nuestro alimento. Nutriéndonos de él, pan de vida, podemos renacer en el amor y romper la espiral de avidez y la codicia. Desde la “casa del pan”, Jesús lleva de nuevo al hombre a casa, para que se convierta en un familiar de su Dios y en un hermano de su prójimo. Ante el pesebre, comprendemos que lo que alimenta la vida no son los bienes, sino el amor; no es la voracidad, sino la caridad; no es la abundancia ostentosa, sino la sencillez que se ha de preservar. En Navidad recibimos en la tierra a Jesús, pan del cielo: es un alimento que no caduca nunca. En Belén, descubrimos que la vida de Dios corre por la venas de la humanidad. Si la acogemos, la historia cambia a partir de cada uno de nosotros. Al subir a Belén, casa del pan, preguntémonos: ¿Cuál es el alimento de mi vida, del que no puedo prescindir?, ¿es el Señor o es otro? Después, entrando en la gruta, ante la tierna pobreza del Niño, preguntémonos: ¿Soy capaz de prescindir de tantos complementos superfluos, para elegir una vida más sencilla? En Belén, junto a Jesús, preguntémonos: En Navidad, ¿parto mi pan con el que no lo tiene? (24-12-2018).

MISA DE MEDIANOCHE

Isaías 9, 1–6: El pueblo que caminaba en tinieblas vio una luz grande; habitaba en tierra y sombras de muerte, y una luz les brilló. Acreciste la alegría, aumentaste el gozo; se gozan en tu presencia, como gozan al segar, como se alegran al repartirse el botín. Porque la vara del opresor, el yugo de su carga, el bastón de su hombro, los quebrantaste como el día de Madián. Porque la bota que pisa con estrépito y la túnica empapada de sangre serán combustible, pasto del fuego. Porque un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado: lleva a hombros el principado, y es su nombre: Maravilla de consejero, Dios fuerte, Padre de eternidad, Príncipe de la paz. Para dilatar el principado, con una paz sin límites, sobre el trono de David y sobre su reino. Para sostenerlo y consolidarlo con la justicia y el derecho, desde ahora y por siempre. El celo del señor del universo lo realizará.

Salmo 95. 1-3.11-13: Hoy nos ha nacido un Salvador: el Mesías, el Señor.

Tito 2, 11-14: Se ha manifestado la gracia de Dios, que trae la salvación para todos los hombres, enseñándonos a que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, llevemos ya desde ahora una vida sobria, justa y piadosa, aguardando la dicha que esperamos y la manifestación de la gloria del gran Dios y Salvador nuestro, Jesucristo, Él cual se entregó por nosotros para rescatarnos de toda iniquidad, y purificar para sí un pueblo de su propiedad, dedicado enteramente a las buenas obras.

Lucas 2, 1-14: Sucedió en aquellos días que salió un decreto del emperador Augusto, ordenando que se empadronase todo el Imperio. Este primer empadronamiento se hizo siendo Cirino gobernador de Siria. Y todos iban a empadronarse, cada cual a su ciudad. También José, por ser de la casa y familia de David, subió desde la ciudad de Nazaret, en Galilea, a la ciudad de David, que se llama Belén, en Judea, para empadronarse con su esposa María, que estaba en cinta. Y sucedió que, mientras estaban allí, le llegó a ella el tiempo del parto y dio a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo recostó en un pesebre, porque no había sitio para ellos en la posada. En aquella misma región había unos pastores que pasaban la noche al aire libre, velando por turnos su rebaño. De repente un ángel del Señor se les presentó; la gloria del Señor los envolvió de claridad, y se llenaron de gran temor. El ángel les dijo: No temáis, os anuncio una buena noticia que será de gran alegría para todo el pueblo: hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un salvador, el Mesías, el Señor. Y aquí tenéis la señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre. De pronto, en torno al ángel, apareció una legión del ejército celestial que alababa a Dios diciendo: Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad.

MISA DEL DÍA

Isaías 52, 7-10: ¡Qué hermoso son sobre los montes los pies del mensajero que proclama la paz, que anuncia la buena noticia, que pregona la justicia, que dice a Sión: ¡Tu Dios reina!. Escucha: tus vigías gritan, cantan a coro, porque ven cara a cara al Señor, que vuelve a Sión. Romped a cantar a coro, ruinas de Jerusalén, porque el señor ha consolado a su pueblo, ha rescatado a Jerusalén. Ha descubierto el Señor su santo brazo a los ojos de todas las naciones, y verán los confines de la tierra la salvación de nuestro Dios.

Salmo 97, 1-6: Los confines de la tierra han contemplado la salvación de nuestro Dios.

Hebreos 1, 1-6: En muchas ocasiones y de muchas maneras habló Dios antiguamente a nuestros padres por los profetas. En esta etapa final, nos ha hablado por el Hijo, al que ha nombrado heredero de todo, y por medio del cual ha realizado los siglos. Él es reflejo de su gloria, impronta de su ser. Él sostiene el universo con su palabra poderosa. Y, habiendo realizado la purificación de los pecados, está sentado a la derecha de la majestad en las alturas; tanto más encumbrado sobre los ángeles, cuanto más sublime es el nombre que ha heredado. Pues, ¿a qué ángel dijo jamás: “Hijo mío eres tú, yo te he engendrado hoy”; y en otro lugar: “Yo seré para él un Padre y él será para mí un Hijo”? Así mismo, cuando introduce en el mundo al primogénito, dice: Adórenlo todos los ángeles de Dios”.

Juan 1, 1-5.9-14: En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba junto a Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba en el principio junto a Dios. Por medio de él se hizo todo, y sin él no se hizo nada de cuanto se ha hecho. En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz brilla en la tiniebla, y la tiniebla no lo recibió. El Verbo era la luz verdadera, que alumbra a todo hombre, viniendo al mundo. En el mundo estaba; el mundo se hizo por medio de él, y el mundo no lo conoció. Vino a su casa, y los suyos no lo recibieron. Pero a cuantos lo recibieron, les dio poder de ser hijos de Dios, a los que creen en su nombre. Éstos no han nacido de sangre, ni de deseo de carne, ni de deseo de varón, sino que han nacido de Dios. Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria: gloria como del Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad. Juan da testimonio de él y grita diciendo: Éste es de quien dije: El que viene detrás de mí se ha puesto delante de mí, porque existía antes que yo. Pues de su plenitud todos hemos recibido, gracia tras gracia. Porque la Ley se dio por medio de Moisés, la gracia y la verdad nos han llegado por medio de Jesucristo. A Dios nadie lo ha visto jamás: Dios Unigénito, que está en el seno del Padre, es quien lo ha dado a conocer.

Lectura diaria de la Biblia

viernes, 24 de diciembre de 2021

24 de diciembre 2021 – viernes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: María hizo posible la encarnación del Hijo de Dios, la revelación del misterio mantenido en secreto durante siglos eternos (Rom 16, 25). Hizo posible la encarnación del Verbo gracias precisamente a su “si” humilde y valiente. María nos enseña a captar el momento favorable en el que Jesús pasa por nuestra vida y pide una respuesta disponible y generosa. Y Jesús pasa. El Verbo, que encontró una morada en el seno virginal de María, en la celebración de la Navidad viene a llamar nuevamente al corazón de cada cristiano: viene y llama (21-12-2014).

Zacarías, padre de Juan, se llenó de Espíritu Santo, y profetizó diciendo: “Bendito sea el Señor, Dios de Israel”, porque ha visitado y “redimido a su pueblo”, suscitándonos una fuerza de salvación en la casa de David, su siervo, según lo había predicho desde antiguo por boca de sus santos profetas. Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian; realizando la “misericordia que tuvo con nuestros padres, recordando su santa alianza” y el “juramento que juró a nuestro padre Abrahán” para concedernos que, libres de temor, arrancados de la mano de los enemigos, le sirvamos con santidad y justicia, en su presencia, todos nuestros días. Y a ti, niño, te llamarán profeta del Altísimo, porque irás delante “del Señor a preparar sus caminos”, anunciando a su pueblo la salvación, el perdón de sus pecados. Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, nos visitará el sol que nace de lo alto, para iluminar a los que viven en tinieblas y en sombra de muerte, para guiar nuestros pasos por el camino de la paz.

2Samuel 7, 1-5.8b-12.14a.16; Salmo 88, 2-5.27.29 . Lucas 1, 67-79

Lectura diaria de la Biblia

jueves, 23 de diciembre de 2021

23 de diciembre 2021 – jueves. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: El tiempo de Adviento nos invita a la vigilancia espiritual para preparar el camino al Señor que viene. El corazón del hombre desea la alegría que viene de la cercanía de Dios. Desde que Jesús entró en la historia, con su nacimiento en Belén, la humanidad recibió un brote del reino de Dios, como un terreno que recibe la semilla, promesa de la cosecha futura. También san Pablo, en la liturgia de hoy, indica las condiciones para ser misioneros de la alegría: rezar con perseverancia, dar siempre gracias a Dios, cooperando con su Espíritu, buscar el bien y evitar el mal. Si este es nuestro estilo de vida, entonces la buena Noticia podrá entrar en muchas casas y ayudar a las personas y a las familias a redescubrir que en Jesús está la salvación (14-12-2014).

A Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y se alegraban con ella. A los ocho días vinieron a circuncidar al niño, y querían llamarlo Zacarías, como su padre; la madre intervino diciendo: ¡No! Se va a llamar Juan. Y le dijeron: Ninguno de tus parientes se llama así. Entonces preguntaban por señas al padre como quería que se llamase. Él pidió una tablilla y escribió: Juan es su nombre. Y todos se quedaron maravillados. Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios. Los vecinos quedaron sobrecogidos, y se comentaban todos estos hechos por toda la montaña de Judea. Y todos los que los oían reflexionaban diciendo: Pues ¿qué será este niño?. Porque la mano del Señor estaba con él.

Malaquías 3, 1-4.23-24; Salmo 24, 4-5.8-10.14 . Lucas 1, 57-66

Lectura diaria de la Biblia

miércoles, 22 de diciembre de 2021

22 de diciembre 2021 – miércoles. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: Como canta María en el Magnífica, “el Señor derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos”. En Navidad Dios se nos da todo dándonos a su Hijo, el Único, que es toda su alegría. Y solo con el corazón de María, la humilde y pobre hija de Sión, convertida en Madre del Hijo del Altísimo, es posible exultar y alegrarse por el gran don de Dios y por su imprevisible sorpresa. Que María nos ayude a percibir el asombro por el nacimiento de Jesús, el don de los dones, el regalo inmerecido que nos trae la salvación (20-12-2015).

María dijo: Proclama mi alma la grandeza del Señor, “se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador; porque ha mirado la humildad de su esclava”. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí: “su nombre es Santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación”. Él hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón”, “derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia” –como lo había prometido a “nuestros padres” -en favor de Abrahán y su descendencia por siempre. María se quedó con Isabel unos tres meses y volvió a su casa.

1Samuel 1, 24-28; Salmo: 1Samuel 2, 1.4-7.8abcd . Lucas 1, 46-56