Lectura diaria de la Biblia
viernes, 1 de septiembre de 20171 de septiembre 2017 – viernes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.
Papa Francisco: Como cristianos, queremos ofrecer nuestra contribución a la superación de la crisis ecológica que la humanidad está viviendo. Para esto debemos en primer lugar sacar de nuestras ricas motivaciones espirituales lo que alimenta la pasión por el cuidado de la creación. Con esta jornada mundial de oración para el cuidado de la creación (1 de septiembre) ofrecerá una preciosa oportunidad para renovar su compromiso personal con su vocación como mayordomos de la creación, para elevar a Dios un agradecimiento por el maravilloso trabajo que Él ha confiado a nuestro cuidado, implorando su ayuda para la protección de la creación y la misericordia por los pecados cometidos contra el mundo en que vivimos (10-8.2015).
Dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: Se parecerá el reino de los cielos a diez vírgenes que tomaron sus lámparas y salieron al encuentro del esposo. Cinco de ellas eran necias y cinco eran prudentes. Las necias, al tomar las lámparas, no se proveyeron de aceite; en cambio, las prudentes se llevaron alcuzas de aceite con las lámparas. El esposo tardaba, les entró sueño a todas y se durmieron. A media noche se oyó una voz: “¡Que llega el esposo, salid a su encuentro!”. Entonces se despertaron todas aquellas vírgenes y se pusieron a preparar sus lámparas. Y las necias dijeron a las prudentes: “Dadnos de vuestro aceite, que se nos apagan las lámparas”. Pero las prudentes contestaron: “Por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras, mejor es que vayáis a la tienda y os lo compréis”. Mientras iban a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban preparadas entraron con él al banquete de bodas, y se cerró la puerta. Más tarde llegaron también las otras vírgenes, diciendo: “Señor, señor, ábrenos”. Pero él respondió: “En verdad os digo que no os conozco”. Por tanto, velad, porque no sabéis el día ni la hora.
1Tes 4, 1-8; Sal 96, 1-2.5-6.10-12 . Mateo 25, 1-13