Archivo de diciembre de 2011

Lectura diaria de la Biblia

lunes, 5 de diciembre de 2011

5 de Diciembre 2011 – Lunes

Mundo: Los escribas y fariseos se escandalizaban de Cristo: es peor la indiferencia.

Fe: Tus pecados están perdonados. Ponte en pie, toma tu camilla y vete a tu casa.

Un día estaba Jesús enseñando, y estaban sentados unos fariseos y maestros de la ley, venidos de todas las aldeas de Galilea, Judea y Jerusalén. Y el poder del Señor los impulsaba a curar. Llegaron unos hombres que traían en una camilla a un paralítico y trataban de introducirlo para colocarlo delante de él. No encontrando por donde introducirlo, a causa del gentío, subieron a la azotea y, separando las losetas, lo descolgaron con la camilla hasta el centro, delante de Jesús. Él, viendo la fe que tenían, dijo: Hombre, tus pecados están perdonados. Los escribas y los fariseos se pusieron a pensar: ¿Quién es éste que dice blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados más que Dios?. Pero Jesús, leyendo sus pensamientos, les replicó: ¿Qué pensáis en vuestro interior? ¿Qué es más fácil: decir “tus pecados quedan perdonados”, o decir “levántate y anda”? Pues, para que veáis que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar pecados dijo al paralítico: A ti te lo digo, ponte en pie, toma tu camilla y vete a tu casa. Él, levantándose al punto, a la vista de ellos, tomó la camilla donde estaba tendido y se marchó a su casa dando gloria a Dios. Todos quedaron asombrados, y daban gloria a Dios, diciendo llenos de temor: Hoy hemos visto cosas admirables.

Is  35, 1-10; Sal 84, 9-14 . Lucas 5, 17-26   

Lectura diaria de la Biblia

domingo, 4 de diciembre de 2011

4 de Diciembre 2011 – Domingo

 

Mundo: Acudían a que el Bautista los bautizara: no todos, sino los que se consideraban pecadores.

 

Fe: Preparadle el camino al Señor, allanad sus senderos. 

 

Is 40, 1-5.9-11: Consolad, consolad a mi pueblo, dice vuestro Dios; hablad al corazón de Jerusalén, gritadle: que se ha cumplido su servicio, y está pagado su crimen, pues de la mano del Señor ha recibido doble paga por sus pecados. Una voz grita: En el desierto preparadle un camino al Señor; allanad en la estepa una calzada para nuestro Dios; que los valles se levanten, que los montes y colinas se abajen, que lo torcido se enderece y lo escabroso se iguale. Se revelará la gloria del Señor, y la verán todos los hombres juntos –ha hablado la boca del Señor-. Súbete a lo alto del monte, heraldo de Sión, alza con fuerza la voz, heraldo de Jerusalén, álzala, no temas, di a las ciudades de Judá: aquí está vuestro Dios. Mirad: Dios, el Señor, llega con fuerza, su brazo domina. Mirad: le acompaña el salario, la recompensa le precede. Como un pastor apacienta el rebaño, su mano las reúne. Lleva en brazos los corderos, cuida de las madres.  
 

Sal 84, 9-14: Muéstranos, Señor, tu misericordia y danos tu salvación.

 

2P 3, 8-14: No perdáis de vista una cosa: para el Señor, un día es como mil años y mil años, como un día. El Señor no tarda en cumplir su promesa, como creen algunos. Lo que ocurre es que tiene mucha paciencia con vosotros, porque no quiere que nadie perezca, sino que todos se conviertan. El día del Señor llegará como un ladrón. Entonces el cielo desaparecerá con gran estrépito; los elementos se desintegrarán abrasados y la tierra con todas sus obras se consumirá. Si todo este mundo se va a desintegrar de este modo, ¡qué santa y piadosa ha de ser nuestra vida! Esperad y apresurad la venida del Señor, cuando desaparecerán los cielos consumidos por el fuego y se derretirán los elementos. Pero nosotros, confiados en la promesa del Señor, esperamos un cielo nuevo y una tierra nueva, y que habite la justicia. Por tanto, queridos hermanos, mientras esperáis estos acontecimientos, procurad que Dios os encuentre en paz con él, inmaculados e irreprochables.

                                            

Marcos 1, 1-8: Comienza el evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios. Está escrito en el profeta Isaías: Yo envío mi mensajero delante de ti para que te prepare el camino. Una  voz grita en el desierto: preparadle el camino al Señor, allanad sus senderos. Juan bautiza en el desierto: predicaba que se convirtieran y se bautizaran, para que les perdonasen los pecados. Acudía la gente de Judea y de Jerusalén, confesaban sus pecados y él los bautizaba en el Jordán. Juan iba vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre. Y proclamaba: Detrás de mí viene el que puede más que yo, y yo no merezco agacharme para desatarle las sandalias. Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo.

Lectura diaria de la Biblia

sábado, 3 de diciembre de 2011

3 de Diciembre 2011 – Sábado

 

Mundo: Llevar la cruz de la vida sin Cristo agota a cualquiera: por eso se compadecía de las gentes, porque estaban extenuadas.

 

Fe: Id y proclamad que el reino de los cielos está cerca.

 

Jesús recorría todas las ciudades y aldeas, enseñando en sus sinagogas, anunciando el evangelio del reino y curando todas las enfermedades y todas las dolencias. Al ver a las gentes, se compadecía de ellas, porque estaban extenuadas y abandonadas, como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: La mies es abundante, pero los trabajadores son pocos; rogad, pues, al Señor de la mies que mande trabajadores a su mies. Y llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad para expulsar espíritus inmundos y curar toda enfermedad y dolencia. A estos doce los envió con estas instrucciones: Id a las ovejas descarriadas de Israel. Id y proclamad que el reino de los cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, echad demonios. Lo que habéis recibido gratis, dadlo gratis.

 

Is  30, 19-21.23-26; Sal 146, 1-6 . Mateo 9, 35-10, 1.6-8   

Lectura diaria de la Biblia

viernes, 2 de diciembre de 2011

2 de Diciembre 2011 – Viernes

 

Mundo: Lo peor de los que viven sin Dios es obstinarse en permanecer a oscuras, sin la luz de la fe.

 

Fe: Que os suceda conforme a vuestra fe: y se les abrieron los ojos.

 

Dos ciegos seguían a Jesús, gritando: Ten compasión de nosotros, Hijo de David. Al llegar a la casa se le acercaron los ciegos, y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacerlo?. Contestaron: Sí, Señor. Entonces les tocó los ojos, diciendo: Que os suceda conforme a vuestra fe. Y se les abrieron los ojos. Jesús les ordenó severamente: ¡Cuidado con que lo sepa alguien!. Pero ellos, al salir, hablaron de él por toda la comarca.

 

Is  29, 17-24; Sal 26, 1.4.13-14 . Mateo 9, 27-31   

Lectura diaria de la Biblia

jueves, 1 de diciembre de 2011

1 de Diciembre 2011 – Jueves

 

Mundo: Escuchad la palabra y despreciarla es edificar la vida sobre arena: hacia la ruina total de la vida.

 

Fe: No todo el que dice “Señor, Señor” entrará en el reino, sino el que cumple la voluntad de mi Padre.

 

Dijo Jesús a sus discípulos: No todo el que me dice: “Señor, Señor” entrará en el reino de los cielos, sino el que cumple la voluntad de mi Padre que está en el cielo. El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió, porque estaba cimentada sobre roca. El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y rompieron contra la casa, y se hundió totalmente.

 

Is  26, 1-6; Sal 117, 1.8-9.19-27 . Mateo 7, 21.24-27