Lectura diaria de la Biblia
4 de Diciembre 2009 – Viernes
Mateo 9,27-31
En aquel tiempo, al marcharse Jesús, le siguieron dos ciegos gritando: Ten compasión de nosotros, Hijo de David. Al llegar a la casa se le acercaron los ciegos y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacerlo? Contestaron: Si, Señor. Entonces les tocó los ojos diciendo: Que os suceda conforme a vuestra fe. Y se les abrieron los ojos. Jesús les ordenó severamente: ¡Cuidado, con que lo sepa alguien!. Pero ellos, al salir, hablaron de él por toda la comarca.